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jueves, 1 de septiembre de 2016

El Amor : Cuatro peldaños iniciáticos




Toda la existencia manifestada gira en torno a una espiral ascendente para realizar una meta única y trascendental: “EL AMOR”.
El amor es entendido de muchas maneras según los diferentes niveles de consciencia en la Humanidad. En los niveles más bajos se llama amor a la sexualidad física; en sectores un poco más elevados en comprensión amor es afecto y cariño por los seres queridos, (familiares, pareja y amigos); siguiendo en la escalera evolutiva, el tercer peldaño lo ocupan quienes llaman amor a las rectas relaciones humanas y el respeto por todos los seres, conducta recta, amorosa y fraternal guiada por la razón e inspirada por ideales nobles. El cuarto puesto, al cual pueden acceder solo grupos espiritualizados, lo ocupan quienes viven la COMPASIÓN en sus corazones, un sentimiento de entrega a la Vida y Devoción a Dios embarga sus almas y hallan en cada entidad viviente una forma del Gran Ser Universal.
Entre estos 4 peldaños hay variados niveles también, pues existen subniveles de comprensión en cada nivel.
Cada uno de los 4 “peldaños” o estados de conciencia, corresponden a los 4 puntos cardinales de la base de una Gran Pirámide Iniciática esotérica, por la cual todas las almas humanas van pasando.
El nivel 1, (1° vértice de la Gran Pirámide esotérica), está polarizado en el plano físico, basa su experiencia en las vivencias de orden material-sensorio. La cumbre y sublimación de este escalón lleva al peregrino a la Primera Iniciación espiritual.
El 2ª peldaño (el Portal al 2° vértice de la Pirámide Iniciática) polariza la experiencia y consciencia en el plano astral, dando a las energías emocionales un papel protagónico principal. El amor, en este nivel, se experimenta primeramente como afecto posesivo y egoísta, apego emotivo, siendo en su cumbre un sentimiento noble transformado en devoción, amor a un ideal y al prójimo. Corresponde a la Segunda Iniciación.

Quienes superan el nivel de la experiencia del plano emocional al plano mental viven ya en el 3ª peldaño (3° Vértice de la Base Piramidal), en cuya comprensión el amor es racionalidad, siendo aquí la escala de valores y principios de fundamental importancia. El DISCERNIMIENTO es característico de este nivel, correspondiente a la Tercera Iniciación.
El 4ª peldaño en la comprensión del amor (4° Vértice) es el escalón de Buddhi, un peldaño más allá de la mente. 

Es Intuición, entendida como consciencia vivencial de la Unidad, y traducida como compasión, servicio y sacrificio del sí mismo por los demás. Corresponde a la Cuarta Iniciación, cuya expresión cumbre es la plena Consciencia de Amor-Sabiduría o Consciencia Crística. En este nivel el peregrino descorre el velo de la Ignorancia y ve a Dios-Padre-Madre en todas las cosas, en todos los seres. La cumbre de este nivel esta retratada por la vida de los santos y Maestros de la Humanidad, que han dejado las huellas de sus pisadas, tras las cuales los discípulos del mundo transitan el Sendero.
Más allá de este 4ª peldaño el Amor adquiere alturas intransferibles para la comprensión humana. El desarrollo interior del hombre que evoluciona en la superficie terrestre está en estos 4 peldaños. Su cumbre es la Iluminación de su mente y corazón fusionados.
En el Plan Evolutivo están establecidos los patrones arquetípicos de este tránsito evolutivo para las almas peregrinas. La Tierra es una escuela cósmica para la graduación en el AMOR-SABIDURÍA, y quienes egresan de la misma son la expresión acabada de su función y propósito.